En la mayoría de los casos, empiezo y termino toda la imagen con mi smartphone. Las limitaciones te obligan a ser más creativo y, mediante la resolución de problemas, se puede encontrar otra respuesta, a menudo más interesante que la intención original. La mayoría de la gente intenta hacer su arte basándose únicamente en la intención, y sólo la considera terminada si se alcanza la intención. A mí me parece que la intención es necesaria para el impulso, pero no es necesaria para terminar, y la mayoría de las veces es mejor que la intención original. En otras palabras, siempre me extiendo hacia fuera al hacer una obra de arte, y dejo que "ella" me diga cuándo he terminado.